Datos privacidad Apple vs Android

La autoridad moral solía basarse en el liderazgo de la moralidad y la ética para denunciar los crímenes y las negligencias. Pero hoy en día, es cualquier cosa con la que puedas salirte con la tuya usando técnicas de publicidad engañosa.

En Apple aseguran que la privacidad es un derecho humano. Sin embargo, esta empresa se ha posicionado como el único árbitro que determina lo que está bien en una industria que ha perdido el rumbo y ha traicionado a sus clientes, ganándose la lealtad ciega de muchos famosos e incluso de la comunidad de privacidad.

Según Apple, ellos son diferentes porque tienen un modelo de negocio basado en vender hardware. Dicen que sus productos son los iPhones, los iPads y los Macs, y que si pueden convencerte para comprar uno de sus dispositivos entonces ganarán algo de dinero. Afirman que no tienen ninguna plataforma de anuncios y que no monetizan los datos de sus clientes. Y muchos han aceptado todo esto sin darse cuenta de que es el software de Apple el que hace que la gente compre su hardware, no al revés.

Pues bien, la política de Apple con su software es la misma que la de cualquier otra plataforma. Y a pesar de sus trucos publicitarios criticando a otras empresas por monetizar sus servicios con anuncios personalizados y herramientas de seguimiento, Apple siempre se ha beneficiado de las tácticas publicitarias que critica.

De esta forma, siempre que inicies sesión con Chrome o que no hayas rechazado todos los usos de tus datos personales, tu iPhone no será distinto de cualquier otro dispositivo. Todo el mundo se pone a alabar a Apple por cada mejora que implementan para supuestamente aumentar la privacidad de los usuarios, incluso aunque estos cambios no tengan ningún impacto relevante.

El argumento más engañoso que utiliza Apple es que existe una alternativa de privacidad para todos sus productos. Afirman que sus usuarios no son los productos y que no van a traficar con sus vidas personales. Sin embargo, resulta frustrante ver a tantas personas creyéndose esta retórica dentro de la comunidad de privacidad. De hecho, al difundir este engaño están perjudicando activamente a los ciudadanos.

En sus materiales publicitarios, Apple describe sus productos como si usasen tus datos de manera completamente diferente. Dicen que lo que pasa en tu iPhone se queda en tu iPhone. Pero nada más lejos de la realidad.

Por ejemplo, fijémonos en el argumento más sólido que utiliza Apple para diferenciar a los iPhones de los dispositivos Android: el número IDFA, que sirve como identificador para los anunciantes y que es el equivalente de Apple al Advertising ID de Google. Se trata de un identificador único almacenado en tu dispositivo que permite a los anunciantes rastrearte y dirigirse a ti a lo largo de distintas aplicaciones, incluso las que están hechas por desarrolladores completamente independientes.

Igual que Google, Apple ha desarrollado este identificador para ayudar a los anunciantes a rastrear mejor a los usuarios. Todos los iPhones y teléfonos Android incluyen de serie este código. Aunque no se puede deshabilitar, sí que puedes indicar que no quieres que te rastreen en cualquiera de estas plataformas. Sin embargo, eso no evitará que los anunciantes puedan rastrearte. El motivo es que el resto de las aplicaciones seguirán teniendo sus propios identificadores vinculados de forma única a ti. Por lo tanto, las medidas que toma Apple no cambian nada a nivel fundamental.

Ahora bien, en Apple han dicho que están dispuestos a ir más allá, y que en lugar de indicar que no quieres que te rastreen, tendrás que especificar que sí que quieres que lo hagan. Esto ha dado como resultado un enfrentamiento entre Apple y Facebook. De hecho, Mark Zuckerberg ha realizado declaraciones públicas oponiéndose a este movimiento de Apple porque perjudicaría a su negocio de publicidad.

Todo el mundo (incluso Mozilla) celebró públicamente esta decisión de Apple por enfrentarse a Facebook. Sin embargo, Zuckerberg no estaba hablando sobre las aplicaciones finales de usuario, como Facebook Messenger o WhatsApp. Además, Apple no se opone a Facebook, sino que hace que se convierta en un monopolio.

Incluso si Apple eliminase el IDFA por completo, eso no perjudicaría a Facebook porque esta empresa ya dispone de multitud de datos de sus usuarios, como direcciones de correo electrónico, números de teléfono e identificadores de cuentas de Facebook. Supuestamente, Zuckerberg estaba defendiendo con valentía a las pequeñas empresas que usan Facebook. Sin embargo, esto no se lo creyó nadie.

En lugar de usar el IDFA de Apple, Facebook creó Audience Network como una herramienta para que los desarrolladores pudieran monetizar sus miles de aplicaciones. Usando esta herramienta, Facebook podrá rastrearte incluso si no tienes aplicaciones de esta empresa instaladas en tu teléfono. Por lo tanto, a Zuckerberg sólo le importan las pequeñas empresas mientras pueda ganar más dinero con ellas.

Pero en esta historia Zuckerberg es tan bueno como Tim Cook. Esto no es “El Señor de los Anillos”, sino “Juego de Tronos”. Y mientras todo el mundo se arrodilla ante Cook, nadie echa un vistazo al pasado para darse cuenta de que fue Apple quien desarrolló su IDFA para ayudar a los anunciantes a rastrear a los usuarios de iPhone. De hecho, Apple nunca tuvo ningún problema con la manera en que Facebook rastreaba a los usuarios de iPhone.

Aunque a todo el mundo se le caiga la baba con el sistema de permisos de IDFA, esto sólo supondrá un problema mínimo para Facebook, que ha creado herramientas para saltarse esta restricción. Por ejemplo, se incita a la gente a iniciar sesión en aplicaciones de terceros usando una cuenta de Facebook. Éste es el mecanismo más sencillo, pero no es el único. Y es el motivo por el que Mark Zuckerberg se mostró optimista frente a los cambios realizados en iOS 14, llegando a decir que su posición se vería reforzada: estos movimientos de Apple animarían a más empresas de comercio electrónico a usar la plataforma de Facebook, lo cual les permitiría usar los datos de los usuarios para rastrearles.

Por su parte, en Google no tienen la más mínima preocupación. El motivo es que no les hace falta recurrir a los identificadores de dispositivos para rastrear a sus miles de millones de usuarios mediante las cuentas de Google. Además, la empresa ya está desarrollando una alternativa para los clientes de la red de anuncios de Google, que les permitirá rastrear a los usuarios de iPhone incluso sin obtener su permiso.

Así que todo el mundo está felicitando a Apple por tener la valentía de acabar con el rastreo de los usuarios de iPhone por parte de los anunciantes, pero éstos son capaces de desarrollar sus propias herramientas para rastrearte con o sin el sistema de Apple. Esto es como felicitar a Google por eliminar las cookies de seguimiento a la vez que desarrolla una nueva herramienta que las sustituye y que funciona mejor a través de distintos dispositivos móviles.

Hay que recordar que Apple se beneficia de los anunciantes y de los desarrolladores de aplicaciones. En concreto, cobran entre un quince y un treinta por ciento por cada compra de aplicaciones o dentro de ellas. Por lo tanto, en realidad Apple no quiere acabar con Facebook porque a esta empresa se le da bien mostrar anuncios a los usuarios de iPhone para que descarguen más aplicaciones. Así que aunque Apple no recopile datos de los usuarios, externaliza esa recolección mediante otras empresas a cambio de una comisión del treinta por ciento.

Si Apple quiere acabar con la recolección de datos, debería dejar de beneficiarse de ella. Las comisiones que cobra Apple son el principal inconveniente en este sentido. Si Apple consigue acabar con el modelo de negocio basado en la publicidad de los servicios gratuitos, entonces todas las aplicaciones de la App Store tendrían que cobrar una cuota de la que Apple se quedaría una parte. Y esto sólo serviría para consolidar la posición en el mercado de esta empresa. El motivo es que los usuarios no pueden instalar de otra forma las aplicaciones y los desarrolladores no pueden ofrecer métodos externos de pago para saltarse la comisión de la App Store.

Durante años, Apple ha atraído y se ha beneficiado de las aplicaciones gratuitas basadas en la publicidad. Y una vez que están todas atrapadas dentro de su ecosistema, Apple podría forzar a todas las aplicaciones a empezar a cobrar. Por lo tanto, es posible llegar a una solución monetizada de este problema.

Para la clase media-alta de los países ricos, esto no supondría ningún problema. Pero para el resto del mundo, que lucha para sobrevivir en medio de la crisis económica producida por la pandemia, esto sí que podría suponer un problema. La única alternativa para esos usuarios es pagar vendiendo sus datos. Es posible que no te guste o que no te parezca justo, pero deberían ser los usuarios finales los que decidan qué es bueno para ellos, en lugar de una corporación centralizada tomando decisiones en nombre de todo el mundo.

En este sentido, me gusta mucho la siguiente cita: “si un negocio se construye engañando a los usuarios o explotando datos sin dejarles decidir, entonces no se merece nuestras felicitaciones, sino una reforma”. Esto lo dijo Timothy Donald Cook, el CEO de una empresa que recibe entre 10 y 15 mil millones de dólares al año de Google por usar su buscador como el predeterminado de Safari. Ese mismo buscador que no podías cambiar hasta iOS 14, mientras que Android siempre te ha permitido tomar esa decisión.

En estos momentos, tanto Google como Apple están siendo investigadas por las agencias antimonopolio por conspirar para monopolizar sus posiciones en el mercado. Este trato es increíblemente lucrativo, porque no supone ningún coste para Apple y los pagos de Google son beneficios limpios que llegan a suponer hasta un quinto del total que ingresa Apple en todo el mundo. Esto ha sido suficiente como para que Apple no se haya planteado crear su propio motor de búsqueda, al menos hasta que las autoridades empiecen a amenazar este multimillonario flujo de dinero.

A Apple le encanta ver cómo Google, Facebook y otros anunciantes violan la privacidad de los usuarios de iPhone, siempre que puedan ganar un montón de dinero. Apple podría ganar ese dinero directamente, pero en vez de eso han decidido externalizar el negocio de la publicidad mediante otras empresas.

Por ejemplo, Apple ha tenido un acuerdo secreto durante años con Facebook para acceder a los datos de los usuarios sin su consentimiento explícito. Se trataba de un acuerdo para compartir datos que Facebook alcanzó con 60 fabricantes de dispositivos, y que les permitía acceder a los datos de los usuarios de Facebook y de sus amistades. Esto incluía a los usuarios que habían denegado los permisos para compartir su información con terceros.

Desde 2011, Facebook tiene la obligación legal derivada de un acuerdo extrajudicial de evitar la modificación de la configuración de privacidad de los usuarios. Pero esta empresa también ha desarrollado una API privada para Apple, Samsung y otros fabricantes, a los que consideraba como proveedores de servicios. Esto significaba básicamente que los usuarios de iPhone podían usar los servicios de Facebook, y a cambio Apple tenía acceso a los datos de Facebook. Pues bien, este acuerdo se terminó en 2018.

Esto quiere decir que a Apple no le importaba acceder a los datos de la gente sin su consentimiento incluso años después de que el escándalo de Cambridge Analytica demostrase que este acceso se había usado con fines maliciosos en campañas políticas, como parte de un enorme abuso de la privacidad de los usuarios. Esto no es hipocresía, es una mentira. La misma mentira que cuando Tim Cook dijo que para ellos la privacidad era un derecho humano.

Mientras Apple aprovechaba todas las oportunidades que pudo para mostrarse como un bastión de la privacidad a raíz de su batalla judicial con el FBI, se asoció con GCBD, una empresa china con estrechos lazos con el partido comunista. El objetivo era construir un centro de datos en China para albergar la información de iCloud. Por lo tanto, en el mundo occidental la privacidad en Apple es un derecho humano. Pero en China, los abogados de Apple incluyeron una cláusula que permite tanto a Apple como a GCBD (y por extensión, al gobierno chino) acceder a todos los datos de los usuarios.

Por lo tanto, mientras Apple recibe felicitaciones en Occidente está construyendo otro centro de datos en China, un país en el que Apple ganó 21,31 mil millones de dólares en el último trimestre de 2020. Esto pone de manifiesto los verdaderos valores de Apple: sus beneficios, su expansión y la cotización de las acciones.

Apple no va a sacrificar sus ingresos para mejorar tu privacidad. De hecho, el modelo de negocio de esta empresa es incompatible con tu privacidad. En este sentido, Apple no es mejor que Google, Facebook o cualquier otra gran empresa tecnológica. Todas ellas son iguales a la hora de usar a sus clientes como sus productos.

La gente estaba dispuesta a pagar más a cambio de algo bueno para ellos, porque Apple hizo que lo creyeran. Pues bien, si tu principal objetivo es la privacidad, entonces la mejor opción no es Apple. Puedes tener la misma o incluso más privacidad y seguridad en un teléfono Android sin sacrificar otras libertades, como el derecho a reparar tu dispositivo o a instalar aplicaciones de código abierto no disponibles en la App Store.

La única plataforma que supone una verdadera diferencia en cuanto a privacidad y seguridad es GrapheneOS. Se trata del sistema operativo más seguro para teléfonos móviles, y está recomendado por Edward Snowden. Eso sí, sin instalar aplicaciones de redes sociales o de Google. Si instalas aplicaciones que comprometen tu privacidad, ningún teléfono podrá garantizártela por arte de magia. Y cualquiera que te diga lo contrario estará mintiéndote.

Apple no te da la opción de mejorar realmente tu privacidad, como sí que ocurre con Android gracias a aplicaciones como el navegador TOR o F-Droid. Así que tomar este tipo de decisiones es muy importante para tu privacidad.